Tentaciones...

Cada septiembre llegan, se instalan durante los días de fiesta, y escondidas entre tazones platos y jarros de barro nos seducen, nos intimidan con la mirada de su único ojo. Estas chichis de barro, con sus sugerentes frases: ¡QUIERO MAS!, 100% pura, LLEGÓ LA LECHE, RICO Y SUAVE, GOSALA. ¿Habrá quien las compre?, yo solo las he visto ahí, pero no me imagino alguna en una cocina, la señora sirviendole un atole de vainilla a su esposo en este recipiente. O a un niño, entrenando con su chichi para ir abandonando los biberones. Mucho menos me los puedo imaginar como floreros, llenos de claveles rojos, debajo de la imagen de un santito, No, no me los puedo imaginar. ¿Ustedes si?

Comentarios

  1. Yo si tengo un par en mi oficina, para ofrecérselos a los gorrones que van a pedirme café. La mayoría prefieren no pedirme ya.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario