El ambiente invernaderil es otra cara -muy agradable- de la vida loka de este amado pueblo. En esta ocasión quiero comentarles algunas anécdotas, que ojalá les gusten.
La primera, es sobre un muchacho (no tan muchacho) que cuando estaba soldando una
estructura para el acceso al invernadero, con el calor de la soldadura se empezó a achicharrar el plástico. Entonces, ni tardo ni perezoso, se quitó la careta, se bajó de la escalera de un brincote y agarró lo primero que tuvo a la mano para intentar apagar el fuego. El problema es que se dió cuenta que lo que arrojó no sirvió mucho para apagar ese pequeño incendio, ya que le arrojó yerba seca... (risas)
Al mismo tiempo se le escuchaba gritar: ¡Ya valió madreeees!
Otra:
Resulta que en una ocasión, se trataba de ilustrar a un grupo de jóvenes inexpertos en el corte o recolección de tomate, así que se les comentó que deberían cortar aquellos frutos que empezaran a perder su color verde, en cuanto les apareciera una suave tonalidad amarilla o levemente rojiza.
Ya estando trabajando se escuchó la voz de un jóven gritar y preguntar: ¡¿y looos rooojooos tambieeeeeén?!...
Estando un grupo de productores de invernadero escuchando una conferencia promocional para el uso de abejorros que permitieran optimizar la polinización, el expositor hizo una muy
convincente argumentación sobre las ventajas de invertir en las colmenas. Ya en la sesión de preguntas, un compañero productor -ahora retirado- insistía en pedir pruebas, garantías de que en verdad aumentaría la producción:
- mmm, a ver ingeniero, entonces ¿voy a aumentar la producción?, ¿garantizadito?
mientras le daba un suave pellizco al aire.
En tanto, entre los rumores de los desesperados asistentes se escuchó:
- Ya güey, no pienses que los abejorros te van a podar, a guiar y a recolectar el tomate...
Una más: En una ocasión, cuando ya no se hallaba como orear el interior del invernadero, luego de una inundación; y de que nuevamente se metiera el agua, cual fue la sorpresa de ver a un valiente ingeniero utilizando una chamuscadora de nopales dirigiéndole el flamazo a los charcos para secarlos...
Si tienen mas anécdotas sobre la invernaderología, favor de compartirlas en sus comentarios.
Y ya en plan serio, les invito a echarle un vistazo a los líderes en producción bajo ambiente controlado.
La primera, es sobre un muchacho (no tan muchacho) que cuando estaba soldando una
estructura para el acceso al invernadero, con el calor de la soldadura se empezó a achicharrar el plástico. Entonces, ni tardo ni perezoso, se quitó la careta, se bajó de la escalera de un brincote y agarró lo primero que tuvo a la mano para intentar apagar el fuego. El problema es que se dió cuenta que lo que arrojó no sirvió mucho para apagar ese pequeño incendio, ya que le arrojó yerba seca... (risas)Al mismo tiempo se le escuchaba gritar: ¡Ya valió madreeees!
Otra:
Resulta que en una ocasión, se trataba de ilustrar a un grupo de jóvenes inexpertos en el corte o recolección de tomate, así que se les comentó que deberían cortar aquellos frutos que empezaran a perder su color verde, en cuanto les apareciera una suave tonalidad amarilla o levemente rojiza.Ya estando trabajando se escuchó la voz de un jóven gritar y preguntar: ¡¿y looos rooojooos tambieeeeeén?!...
Estando un grupo de productores de invernadero escuchando una conferencia promocional para el uso de abejorros que permitieran optimizar la polinización, el expositor hizo una muy
convincente argumentación sobre las ventajas de invertir en las colmenas. Ya en la sesión de preguntas, un compañero productor -ahora retirado- insistía en pedir pruebas, garantías de que en verdad aumentaría la producción:- mmm, a ver ingeniero, entonces ¿voy a aumentar la producción?, ¿garantizadito?
mientras le daba un suave pellizco al aire.
En tanto, entre los rumores de los desesperados asistentes se escuchó:
- Ya güey, no pienses que los abejorros te van a podar, a guiar y a recolectar el tomate...
Una más: En una ocasión, cuando ya no se hallaba como orear el interior del invernadero, luego de una inundación; y de que nuevamente se metiera el agua, cual fue la sorpresa de ver a un valiente ingeniero utilizando una chamuscadora de nopales dirigiéndole el flamazo a los charcos para secarlos...
Si tienen mas anécdotas sobre la invernaderología, favor de compartirlas en sus comentarios.
Y ya en plan serio, les invito a echarle un vistazo a los líderes en producción bajo ambiente controlado.
ok
ResponderEliminarhttp://algosano.blogspot.com/
los invernaderos vicozac an dado trabajo a mucha gente, y opino que se podrian grabar mas sobre dichos invernadeos ya que son una fuente de trabajo hasta para los jovenes que quieren trabajar en las vacaciones de julio ya que les dan oportunidad de laborar.
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